Los nuevos discos MG08 son unidades de 3,5 pulgadas con una velocidad de giro de 7.200 RPM, 512 MB de buffer e interfaces SATA 6 Gbps o SAS 12 Gbps en función de las necesidades del cliente. Como sus hermanos de 14 TB, los MG08 utilizan una relativamente exótica configuración de nueve platos y la tecnología de grabación magnética bidimensional (TDMR). Junto a la grabación HAMR, este avance será una de las claves a la hora de seguir aumentando la capacidad de los discos duros más allá de sus límites actuales.
Básicamente la tecnología TDMR permite incrementar la superficie de grabación de los platos de los discos duros convencionales creando pistas más estrechas sin dar lugar al fenómeno conocido como interferencia interpista magnética (ITI por sus siglas en inglés), que introduciría una cantidad de ruido excesiva en la señal. Según Toshiba, la tecnología TDMR permite aumentar la densidad por área en un 10 %.
Si bien no faltarían los usuarios domésticos interesados en montar una de estas unidades como servidor multimedia o almacén de juegos, por ahora solo serán utilizados en entornos profesionales. Toshiba ha concebido sus MG08 para aplicaciones nearline, es decir, salas de almacenamiento automatizadas para grandes empresas y servidores, y de hecho ni siquiera se conocen sus datos de rendimiento. De hecho, en su construcción se utilizan motores especiales y sistemas de mitigación de vibraciones, lo que sin duda también se dejará notar en el precio.
El anterior récord de capacidad para un disco duro fue fijado en 2017 con las primeras unidades de 14 TB. La introducción de las tecnologías HAMR y MAMR (grabación magnética asistida por microondas) posiblemente nos llevará a los 20 TB dentro del siguiente salto, con la capacidad para alcanzar los 100 TB a más largo plazo.