De aspecto familiar, el Mi Watch posee una pantalla AMOLED de 1,78 pulgadas con función de encendido permanente y apagado selectivo. Se engasta en un chasis que mezcla cerámica y aluminio. Entre sus funciones técnicas encontramos NFC para pagos digitales y soporte para conexiones de datos mediante eSIM, puesto que utiliza un chipset Snapdragon Wear 3100 con módem LTE integrado.
Según Xiaomi, la batería es de 36 horas con la conexión de datos activada. El sistema de carga es inalámbrico, utilizando una base magnética con conectores de tipo pogo.
Pantalla AMOLED 368 x 448 de 1,78 pulgadas con Gorilla Glass 3/zafiro
Snapdragon Wear 3100
1 GB de RAM + 8 GB de almacenamiento
Sensor de ritmo cardiaco, brújula, sensor de iluminación ambiental, sensor A+G, barómetro
GPS, GLONASS y Beidou
802.11b/g/n, Bluetooth 4.2 y LTE
Batería de 570 mAh
44,69 x 36,92 x 12,28 mm, 44/55 gramos (base y Premium, sin correa)
La lista de especificaciones muestra el repertorio de sensores habitual, ofreciendo compatibilidad con diversas prácticas deportivas (incluida la natación) mediante alguna clase de aplicación propia que también gestiona los descansos y la oxigenación para los entrenamientos de alta intensidad. Lamentablemente, aunque Xiaomi indica que el Mi Watch se puede llevar a la piscina (el soporte para natación llegará "a comienzos de 2020"), la compañía no expresa el nivel de resistencia al agua.
El Mi Watch aún no tiene precio ni fecha de lanzamiento en Europa. En China, donde aparecerá el 11 de noviembre, se ofrecerá por el equivalente a 170 euros. También habrá un modelo Premium Edition con cuerpo de acero inoxidable y cristal de zafiro en lugar de Gorilla Glass por unos 256 euros.