Bautizado únicamente como "RGB Micro LED", este televisor intenta crear una suerte de puente entre las tecnologías LCD, asequible y madura, y la MicroLED, más puntera pero también muchísimo más costosa. Para ello se vale de un panel LCD convencional, pero en lugar de iluminarlo utilizando una distribución full array de diodos LED blancos o azules, utiliza puntos MicroLED con capacidad para emitir luz roja, verde y azul.
En total, el Samsung RGB Micro LED, que en su estado actual posee resolución 8K y un tamaño de 98 pulgadas, integra tres veces más zonas de iluminación atenuable que un televisor Neo QLED 8K convencional. No solo esta enorme densidad reduce el blooming y genera un contraste más elevado, sino que debería proporcionar más luminosidad.
Otros beneficios son una importante reducción de peso del televisor (alrededor de un 20 % frente a un Neo-QLED comparable) y la cobertura del 90 % del espacio de color Rec. 2020/BT.2020, que son palabras mayores para un televisor.
Según ha indicado un representante de Samsung durante el CES, la compañía tiene intención de empezar a fabricar televisores LCD con MicroLED RGB durante este mismo año. Su precio será comprensiblemente elevado.