Según Gartner, que ha analizado los datos de distribución a los canales de ventas, entre los meses de abril y mayo se vendieron algo más de 62 millones de unidades frente a los 61,25 millones del mismo periodo del año anterior. Lenovo, que recientemente estableció una joint venture con Fujitsu, se coronó vencedora en el ranking mundial con 13,6 millones de unidades, aunque solo por los pelos. HP le siguió muy de cerca, con 13,58 millones.
La tercera, cuarta y quinta posición pertenecen a Dell, Apple y Acer, por ese orden. Sus ventas respectivas fueron de 10,45 millones, 4,39 millones y 3,9 millones de ordenadores, respectivamente. El resto de las unidades distribuidas, más de 16 millones, caen en el ambiguo paraguas de "otros", donde se incluyen todos los demás fabricantes seguidos por Gartner.
Cabe señalar que el crecimiento de las ventas no se debe a un interés de los consumidores de a pie, sino al mejor comportamiento del mercado empresarial. De hecho, Gartner señala que el usuario común utiliza su teléfono móvil para un mayor número de funciones, lo que sigue reduciendo la necesidad de comprar un PC.
La firma no se extiende mucho sobre las perspectivas a largo plazo, más allá de que espera una reducción de ventas en el segmento profesional en cuestión de dos años como consecuencia del ciclo de renovación de sistemas basados en Windows 10.
El informe de Gartner contabiliza los equipos personales de sobremesa, portátiles tipo notebook y lo que denomina "ultramóviles premium", que no son otra cosa que dispositivos como Surface. No entran los iPad ni los Chromebook.