Tanto la versión de 13 pulgadas como su hermano mayor de 15 se benefician ahora de la presencia de procesadores Core de octava generación. El modelo más pequeño está dotado con un Core i5 de cuatro núcleos a 2,3 GHz, sustituible por un Core i7 a 2,7 GHz. Se acompañan por 8 o 16 GB de RAM (opcionales), así como unidades SSD de 256 y 512 GB, con la posibilidad de configurarlos con 1 o 2 TB.
En cuanto al modelo de 15 pulgadas, ahora se ofrece con procesadores Core i7 de seis núcleos a 2,6 GHz o un flamante Core i9 a 2,9 GHz. La RAM base es de 16 GB, con un tope de 32 GB, mientras que el almacenamiento SSD parte de 512 GB y puede alcanzar los 4 TB una vez entrados en el apartado de configuración. Este último modelo complementa además los gráficos integrados con una Radeon Pro 560X con 4 GB.
Según señala Apple, ambos modelos se benefician de mejoras comunes de cierto calado. Las pantallas cuentan ahora con la tecnología True Tone para ajustar la temperatura de color en función de la habitación (un efecto que alcanza a la barra Touch Bar), mientras que un nuevo chip llamado T2 controla elementos como el acceso directo a Siri mediante órdenes de voz y sin necesidad de pulsar botón alguno. Finalmente, hay un teclado de mariposa más silencioso y baterías de mayor capacidad (aunque esto no repercute en la autonomía debido al mayor consumo de los nuevos procesadores).
En cuestión de precios, el nuevo MacBook Pro de 13 pulgadas con Touch Bar arranca en los 1.999 euros y toca techo en los 2.249 euros de la versión más equipada. El de 15 pulgadas se va lógicamente más arriba, con unas tarifas de 2.799 y 3.299 euros en función del hardware. Eso es sin alterar las opciones básicas de configuración, porque si se empiezan a modificar valores como la RAM y el almacenamiento podemos encaramarnos hasta los 7.959 euros.
Apple los comercializará junto a una funda de cuero opcional apta para los MacBook de 12 pulgadas (169 euros), el Pro de 13 pulgadas (199 euros) y el Pro de 15 pulgadas (229 euros).
GPU externa opcional desarrollada por Blackmagic
De forma paralela, la firma especializada en productos de captura y producción de vídeo Blackmagic ha anunciado una GPU externa o eGPU. Este aparato aporta una potencia gráfica considerable a cualquiera de los portátiles de la firma de la manzana (y teóricamente de cualquier otra marca) y ha sido desarrollado en colaboración con la propia Apple.
Este accesorio cuenta en su interior con una tarjeta gráfica Radeon Pro 580 y 8 GB de memoria. Posee dos puertos Thunderbolt 3 para facilitar su conexión, así como cuatro USB 3.1 y un HDMI 2.0. La alimentación se realiza usando una fuente propia de 85 vatios que también proporciona energía suficiente para cargar otros dispositivos externos, incluyendo el propio portátil.
Según Blackmagic, esta eGPU resulta especialmente útil a la hora de ejecutar su software DaVinci Resolve 15. Apple, por su parte, señala que proporciona un rendimiento gráfico casi tres veces superior al del MacBook Pro base y unas ocho veces mayor que el del modelo de 13 pulgadas. En cuanto a la cuestión del precio, Apple lo tiene en su tienda por 695 euros.