Comenzando por la GTX 1650 Ti, esta unidad gráfica sin equivalente directo para equipos de sobremesa está basada en una GPU TU116 como la versión base para equipos portátiles, pero incrementa sus núcleos CUDA a 1.024 como estándar (hasta ahora las 1650 para portátiles tenían "hasta 1.024 núcleos CUDA") e integra memoria GDDR6. El TDP, por su parte, se incrementa ligeramente, alcanzando los 55 W.
Por otro lado, Nvidia también ha anunciado la GTX 1650 con GDDR6. No cambia nada más salvo el tipo de memoria utilizado, pero no es poca cosa si se considera que esta GPU debería gozar ahora de una mejora en el ancho de banda del 50 %. Como detalle interesante, la gama GTX 1650 sustituirá en la parte baja del segmento gaming a las GTX 1050, que ya podemos considerar una línea abandonada para ordenadores portátiles.
Saltando ya a la gama RTX, actual abanderada del catálogo, Nvidia ha dotado a las versiones móviles de sus RTX 2070 Super y RTX 2080 Super con el mismo diseño base de GPU que en sus versiones de sobremesa, haciendo uso de una GPU TU104. Esto implica el mismo número de núcleos CUDA, con 2.560 y 3.072, así como la utilización de 8 GB de RAM GDDR6, aunque con el detalle de que su memoria funciona a 14 Gbps en lugar de 15,5 Gbps como en las tarjetas para torres.
También varía la velocidad de reloj de las GPU, reducida para dejar un TDP que oscilará entre los 80 y los 150 W dependiendo de la configuración. Cada fabricante podrá ajustar el valor de consumo en función de las necesidades específicas y la orientación de sus portátiles, por lo que cabe esperar las Super más gastonas en equipos de tamaño considerable y las versiones de consumo austero en otros de tipo Max-Q, más próximos al formato Ultrabook.
Los primeros portátiles dotados con las nuevas GPU RTX Super deberían llegar a lo largo de las próximas semanas en todo tipo de configuraciones, desde Max-Q a estaciones de trabajo RTX Studio.