En cifras, Amazon registró unos ingresos de 60.500 millones de dólares durante los últimos tres meses del año (un 38 % más que en el mismo periodo de 2016), de donde salieron 1.856 millones en beneficios. Este dato muestra la importancia de la campaña navideña en las cifras globales de Amazon, que durante todo 2017 registró unos ingresos de 117.900 millones de dólares y unos beneficios de 3.033 millones.
Los datos trimestrales de Amazon son notables no solo por su volumen, sino también porque marcan el undécimo trimestre con beneficios para la compañía. Amazon no siempre ha generado beneficios de forma continua, y de hecho su política de realizar grandes inversiones en infraestructura ha resultado ocasionalmente en pérdidas trimestrales. Esta situación parece ser ya cosa del pasado.
Más allá de las cifras, los resultados de Amazon resultan interesantes porque la compañía suele proporcionar información interesante sobre el funcionamiento de sus negocios y lo que podemos esperar a más largo plazo.
Por ejemplo, sabemos que en 2017 hubo más miembros Prime de pago que en ningún otro año y que los TV Stick y Echo Dot fueron los productos más populares durante 2017 de todos los comercializados por Amazon como propios. La nota de prensa no facilita datos concretos, como viene siendo habitual, pero señala que las ventas se situaron en "decenas de millones de dispositivos Echo".
Asimismo, Amazon ha declarado que contrató a un total de 130.000 empleados globalmente durante 2017, eso sin contar adquisiciones como la cadena de supermercados Whole Foods.
Dicho todo esto, los beneficios obtenidos por Amazon son muy limitados para una empresa de su tamaño, en parte porque depende de unas ventas con muy poco margen. Es por eso que Amazon va a poner un mayor énfasis en la expansión de productos y servicios como los ofrecidos por su división de computación AWS, que aportó durante el cuarto trimestre de 2017 unas ventas de 5.113 millones de dólares frente a los 3.500 millones del año anterior.