Las protestas fueron inmediatas, y es que los consumidores interesados en adquirir una de estas tarjetas de gama baja están forzados a leer la letra pequeña para saber qué versión tienen en sus manos. Anteriormente AMD ha vendido modelos de bajo consumo con prestaciones más ajustadas, pero estas tarjetas han tenido alguna clase de apelativo que ayudaba a diferenciarlas. No ha sido el caso con la Radeon 560, que es comercializada en dos versiones distintas bajo el mismo nombre. La confusión (y la airada reacción de algunos consumidores) era por tanto inevitable.
Finalmente, y tras varios días de polémica, AMD ha pedido disculpas. En un mensaje remitido a los medios la compañía señala que esta nueva versión fue introducida para proporcionar una mayor flexibilidad a los fabricantes. De acuerdo con AMD, se están tomando medidas con carácter inmediato en conjunto con sus socios y tiendas online para ofrecer algún tipo de diferenciación que facilite distinguir unas tarjetas de otras. Hasta entonces, los consumidores deberán observar con detenimiento la descripción del hardware para evitar adquirir por error uno de estos modelos de bajo consumo e inferior rendimiento.
Anunciada en el mes de abril, la RX 560 forma parte de la última evolución de Polaris y se sitúa en la parte baja del mercado, ofreciéndose en configuraciones de memoria con 2 y 4 GB. Según AMD, el modelo "completo" (por diferenciarlo de esta versión más reciente) rinde aproximadamente un 57% más que la antigua R7 3608. Dependiendo del fabricante y el modelo, se puede encontrar por entre 100 y 150 euros.