El efecto rejilla, como seguramente sabrán los propietarios de un visor de realidad virtual (o un proyector DLP), se genera cuando las líneas que separan los píxeles individuales de una pantalla se hacen visibles, dando la impresión de que la imagen está siendo observada a través de una fina mosquitera.
El fabricante japonés JDI (consorcio formado por Sony, Toshiba e Hitachi) quiere evitar este desagradable efecto con una pantalla especialmente creada para sistemas de realidad virtual que aglutina 1.440 x 1.700 píxeles en un panel de 3,42 pulgadas, exhibiendo un total de 651 píxeles por pulgada. Como referencia, la pantalla de PlayStation VR alcanza un total de 386 PPI y las integradas en Oculus Rift brindan 461 PPI.
La imagen generada por un teléfono móvil es mucho más borrosa en movimiento, según afirma JDI.
La nueva pantalla desarrollada por JDI no es solo especialmente densa. Su refresco de 90 Hz la sitúa por encima de las pantallas de teléfono móvil (como referencia, DayDream exige un refresco mínimo de 60 Hz) y a la altura de dispositivos como Oculus Rift y HTC Vive (pero por debajo de PlayStation VR con sus 120 Hz). Esto implica una mejora en la calidad de imagen durante escenas con una gran cantidad de movimiento, donde las pantallas de teléfonos móviles resultan patentemente insuficientes.
JDI, que es una de las firmas más importantes en la producción de paneles para teléfonos móviles, deberá convencer ahora a las compañías especializadas en soluciones de realidad virtual de que sus pantallas son ideales para los dispositivos de próxima generación. En caso de que sus especificaciones todavía no sean lo suficientemente interesantes, la compañía ya ha anunciado que está trabajando en un futuro modelo con una densidad de 800 PPI.