Según ha podido saber Ad Age, algunas de las firmas más influyentes de Internet han creado un frente común para perseguir y extinguir la publicidad más molesta de los sitios web a través de la inclusión de bloqueadores y otras medidas de filtro que evitarían la aparición de pop-ups, pop-unders y vídeos con reproducción automática en Chrome o Edge.
Estas conversaciones estarían teniendo lugar en el seno de la Coalition for Better Ads, una asociación de la que forman parte Google, Microsoft y Facebook junto a compañías como Procter & Gamble, Unilever, GroupM, Thomson Reuters y la Federación Mundial de Anunciantes (WFA por sus siglas en inglés). El propósito de esta organización no es otro que establecer una serie de estándares de calidad para la publicidad en Internet.
Así como inicialmente la noticia original podía despertar ciertas suspicacias debido al riesgo de que Google aumentara aún más su dominio sobre la publicidad en Internet mediante la introducción de filtros en Chrome, el apoyo de firmas como Microsoft y Google deja entrever una situación muy distinta: no es que Google quiera acabar con la publicidad ajena, es que la publicidad intenta salvarse de sí misma.
Cada vez más personas toman medidas para evitar la invasión de banners extremadamente molestos y ventanas emergentes, pero estos filtros rara vez discriminan y acaban por eliminar toda la publicidad. Si las empresas de Internet establecen unos límites defendidos por los propios navegadores es posible que muchos usuarios no instalen este tipo de complementos, dando un respiro tanto a los anunciantes como a las páginas web que dependen económicamente de los ingresos publicitarios.
Según un abogado de la Coalition for Better Ads consultado por Ad Age, antes de que acabe este año podríamos ver algún tipo de mecanismo de bloqueo oficial para navegadores. "El objetivo último es eliminar estos tipos de anuncios que están perjudicando la experiencia de Internet del consumidor", reconoce el abogado.
Sus afirmaciones no son gratuitas. A comienzos de año la compañía realizó un estudio sobre 25.000 internautas de Europa y Estados Unidos, observando que los usuarios de equipos de sobremesa detestan las ventanas emergentes, los vídeos con sonido que se reproducen automáticamente, los "prestitial" que bloquean toda la página antes de que esta se cargue y aquellos anuncios que ocupan más del 30% de la pantalla. Los usuarios móviles, además, suman a su lista negra los anuncios que requieren desplazar la pantalla y aquellos con animaciones molestas.