El Galaxy Fold, recordemos, iba a convertirse en el primer teléfono de pantalla plegable fabricado en masa. Inicialmente tenía que salir a la venta en Europa el pasado 3 de mayo con un PVP de 2.000 euros, pero los eventos de presentación locales fueron cancelados rápidamente después de que varios periodistas y YouTubers se quejaran de que las pantallas de sus dispositivos estaban totalmente rotas o presentaban graves fallos a los pocos días de uso.
Vídeo promocional difundido por Samsung antes del retraso.
Algunas de estas unidades pudieron haberse averiado al retirarse una capa de polímero especial que a simple vista parecía ser un plástico protector de pantalla. Ahora, este elemento se extiende hasta el propio marco del teléfono para "hacer evidente que es una parte integral de la estructura de la pantalla y no debe ser retirada".
Asimismo, el teléfono incorpora otra serie de cambios para atajar la introducción de partículas, otra posible fuente de problemas. Con este efecto Samsung ha protegido la parte superior e inferior del mecanismo de la bisagra con alguna clase de tapón o junta protectora, mientras que la propia estructura de la pantalla cuenta ahora con un refuerzo estructural formado por capas metálicas. Finalmente, se ha reducido el espacio entre la bisagra y el teléfono en sí mismo.
Según ha señalado Samsung, los detalles relacionados con la disponibilidad del teléfono se harán públicos según se acerque el lanzamiento. Por ahora nada se sabe acerca de cambios en el precio de venta al público.