Para tratar de solucionar este problema Google anunció el año pasado el lanzamiento de un filtro de publicidad para Chrome con la capacidad para bloquear anuncios de baja calidad, incluyendo los de su propia plataforma. Ya implementada en su navegador, esta funcionalidad se hace ahora más estricta con la capacidad para bloquear absolutamente todos los anuncios de los sitios con publicidad invasiva, como aquellos que plagan pestañas completas con ventanas difíciles de cerrar o que activan mensajes emergentes de "advertencia" o simulando ser parte del sistema operativo.
Este tipo de sitios, que por otro lado suelen estar asociados a la difusión de todo tipo de malware inyectado a través del navegador o mediante descargas, desde ladrones de información personal a criptomineros ocultos, serán purgados de publicidad por defecto. No mostrarán anuncios de ninguna clase. La funcionalidad será implementada oficialmente en Chrome 71, cuyo lanzamiento está previsto para diciembre.
Para evitar posibles malentendidos los administradores de un sitio web podrán acceder a la herramienta de "experiencias abusivas" de Google para ver si sus páginas se ajustan a los parámetros considerados como correctos. Los sitios infractores tendrán un plazo de 30 días para rectificar la forma en la que muestran su publicidad, periodo tras el cual Chrome comenzará a bloquear toda su publicidad.
A pesar de que este cambio busca bloquear la publicidad más intrusiva e indeseable de Internet, aquella que incluso puede esconder peligros, los usuarios de Chrome tendrán la posibilidad de desbloquear los filtros de Chrome de forma manual.